Por segundo año consecutivo funcionarios y estudiantes de nuestro colegio participaron activamente este miércoles 21 de diciembre en la Cena de Navidad para personas en situación de calle y adultos mayores que viven en soledad; una actividad que fue organizada por la Universidad Católica de la Santísima Concepción, sede Chillán, por la Parroquia El Sagrario, la empresa privada y el Colegio Bicentenario Padre Alberto Hurtado.
La actividad se desarrolló en la Catedral de Chillán, la que se convirtió en un gran comedor para acoger a más de 200 personas en situación de vulnerabilidad. En las inmediaciones, se dispuso de una peluquería gratuita y un ropero, además se efectuó en el frontis de la Catedral varios shows artísticos, entre los que destacó la presentación de la Coro Infantil de nuestro colegio que deleitó a los presentes con hermosos villancicos, bajo la dirección por la profesora María Díaz de Arcaya.
El menú de esta ocasión fue preparado por las docentes de la especialidad de Gastronomía, Etelvina Gómez y Carolina Astudillo junto con sus alumnos, donde sirvieron a los invitados un exquisito menú que consistía en una Causa Reina con hortalizas del huerto como entrada, Braseado de vacuno con polenta a las finas hierbas y cebolla caramelizada como plato de fondo y Cheesecake de frutillas con salsa de chocolate y praliné de pistachos de postre. La bendición de esta cena fue dirigida por el obispo de Chillán, padre Sergio Pérez de Arce.
En esta ocasión, la actividad contó con la presencia y ayuda como anfitriones de las autoridades universitarias, encabezadas por su rector Cristhian Mellado, el director de la sede Henry Sanhueza, el alcalde Camilo Benavente, el presidente de la Cámara de Comercio y Turismo, Alejandro Lama, el delegado presidencial, Gabriel Pradenas, el jefe social del Hogar de Cristo Chillán, Héctor Higuera, nuestro rector, Don Daniel Almonte Puentes y el presidente Fundación Educacional Padre Vicente de las Casas, Don Ignacio Iriarte Torres. También participaron representantes de las Fuerzas Armadas y de Orden de la región.
Queremos agradecer el entusiasmo, dedicación, esfuerzo y el amor al necesitado demostrado por cada uno de los integrantes de nuestra comunidad. Instancias como estas sirven para manifestar la alegría que nos hace bien para construir una sociedad más justa y fraterna, como lo soñó el Padre Alberto Hurtado.